Jesús Mateo es un Sacerdote amigo de Valladolid, que me manda diariamente un lindo comentario del Evangelio.
Pienso que vale la pena compartirlo con los sacerdotes y con los seglares que lo soliciten.
Lo pongo todos los días en dos de mis Blogs católicos. Franja
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10 de octubre, sábado de 2020.
Comentario del Evangelio: "BIENAVENTURADO EL VIENTRE QUE TE LLEVÓ Y LOS PECHOS QUE TE CRIARON" (Lc 11, 27-28).
Es un piropo precioso a la Virgen.
Imagínate la escena: Jesús estaba predicando y la multitud lo escuchaba embebida. De pronto, una mujer sencilla, una mujer de pueblo, entusiasmada por la presencia y por la predicación de Jesús, alzó la voz y gritó: "Bienaventurado el vientre que te llevó y los pechos que te criaron".
Yo creo que tuvo que haber un aplauso espontáneo para aquella mujer que "envidió" santamente a la madre de Jesús y la alabó como la mejor de todas las madres.
A todos los hijos lo que más nos agrada es que hablen bien de nuestra madre y nos digan que nos parecemos a ella.
A Jesús le llegó al alma esta felicitación en honor de su Madre y añadió Él otra felicitación: "Que nadie como Ella había cumplido la Voluntad de su Padre".
Ojalá nos parezcamos a esa mujer del Evangelio y le digamos a la Virgen esas mismas palabras o algunas que se nos ocurra; puede ser: Madre, madre mía. También podemos repetir las jaculatorias de las letanías del Santo Rosario.
En honor de la Virgen muchos tienen en su despacho, en la mesa de estudio, una estampa de la Virgen y a Ella le ofrecen su trabajo.
Qué buen gusto y qué buena idea los que tienen en su dormitorio un cuadro de la Virgen y rezan ante Ella las tres avemarías antes de acostarse, y por la mañana le ofrecen el nuevo día. No debería faltar en ninguna habitación un cuadro o una estampa de la Virgen.
Muchos, muchos, llevan en su cartera, en su móvil y en el coche una estampa de la Virgen y a Ella se encomiendan.
¡Qué bueno es llevar el Escapulario del Carmen!
Muy buena costumbre es rezar a las doce del mediodía el Ángelus. Si no lo haces, empieza hoy. Darás una gran alegría a la Virgen.
El otro día felicité a un taxista por llevar en su coche una imagen de la Virgen y me manifestó que nadie le había protestado por ello, y que nunca la quitaría porque se la había regalado la abuela para que Nuestra Señora lo protegiera.
Esta devoción y este amor a la Virgen nos debe llevar a imitarla, a parecernos a Ella. Esta es la auténtica devoción a la Virgen: el cumplimiento fiel de nuestros deberes; llevar la alegría allí donde vamos; rechazar todo pecado; luchar con empeño contra nuestros defectos.
Jesús Mateo. Sacerdote
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Que Dios pague este esfuerzo diario y que Santa María la Virgen no nos abandona nunca. Que el Señor nos bendiga y nos guarde. Un abrazo. Franja.
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Confeccionado por Franja.
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Virgen del Pilar
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