Homilías del Papa y Temas sacerdotales
D. Jesús Mateo, es un sacerdote amigo de Valladolid, que se dedica pacientemente a mandarnos un pequeño comentario del Evangelio de la liturgia del día. Y como es muy corto y enjundioso os hago participes. Franja
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Lunes, 27 de Mayo de 2019.
Comentario «CUANDO VENGA EL PARÁCLITO, QUE YO OS ENVIARÉ...» (Jn 15, 26).
¡ Qué gran promesa la de Jesús: «Nos enviará el El Espiritu Santo y estará siempre con nosotros»!
Jesucristo nos anuncia que nos enviará al Defensor, al Paráclito, al Espíritu Santo.
En esta ocasión nos da a entender
que vamos a necesitar al Espíritu Santo y será ÉL quien nos dará fuerzas para superar todas dificultades.
Jesús nos explica que el que dé testimonio suyo, el que sea un cristiano coherente está expuesto a que le ataquen, a que le persigan, con persecuciones, pequeñas persecuciones, como las de las habladurías y de las críticas. Y también con las persecuciones de las que la historia de la Iglesia está llena: conducen a los cristianos a la cárcel o incluso a dar la vida.
Pero el Señor nos promete que nos enviará el Espíritu Santo y con su ayuda superaremos todas dificultades.
A mí me impresiona la vida de los mártires. ¡Qué fuertes! ¡Qué valientes! Dieron la vida por el Señor.
¿ Y en la actualidad continúa habiendo mártires? Todos los años nos enteramos de misioneros y de cristianos que han muerto manifestando su amor y su fe en Jesucristo y perdonando a sus verdugos.
Muchos se preguntan: ¿Esto es posible? Sí, con la gracia de Dios.
Y no sólo los mártires. ¡Hay tantas personas que diariamente ofrecen su vida a Dios, y viven para Él!
Personas que pasan por la vida haciendo el bien a manos llenas, y sin llamar la atención. Personas, sembradores de paz y alegría.
Personas que «van contra corriente»; que no se dejan arrastrar por el ambiente; católicos que se «juegan» el puesto a diario por ser fieles al Señor.
¿Que esto es imposible?
Con la ayuda del Espíritu Santo es posible. ACUDE A Él. (Y lo comprobarás).
Jesús Mateo. Sacerdote.
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Que Dios pague ese esfuerzo diario y que Santa María la Virgen no nos abandone nunca. Franja.
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