Homilías del Papa y Temas sacerdotales
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-Jesús Mateo, es un sacerdote amigo de Valladolid, que manda diariamente un lindo comentario del Evangelio, que vale la pena meditarlo y compartirlo también con los seglares.
Yo lo pongo ahora todos los días en uno de mis Blogs. Franja.
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5 de Noviembre, Martes de 2019.
Comentario: "Y YO OS DIGO QUE NINGUNO DE AQUELLOS CONVIDADOS PROBARÁ MI BANQUETE" (Lc 14, 15-24).
¿Estaremos tú y yo entre esos convidados que no entrarán en el Reino de los Cielos?
"Triste cosa será pero posible"
Otra vez me impresionan fuertemente las palabras de Jesucristo que quiere que todos los hombres se salven, pero nos hace ver que algunos rechazan la voluntad y la invitación de Dios Nuestro Señor.
Queda bien claro que Dios nos busca insistentemente a cada hombre. Nos llama, como a Zaqueo, por nuestro nombre. Busca el corazón de cada uno de nosotros.
Llama a tu puerta y a la mía para que le dejemos entrar.
¿con el corazón cerrado con siete cerrojos,
como el de los fariseos?
Tú y yo, ¿le dejamos
entrar o tenemos el corazón cerrado con siete cerrojos?
Mira, si escuchas la llamada de Dios, "no endurezcas tu corazón"; Si Dios te llama, coge la llamada.
¡¡¡Son tantas las llamadas y las invitaciones que Dios nos hace!!!
Pero lee el Evangelio y verás las excusas que ponen los convidados (que somos tú y yo).
"En aquel tiempo, uno de los comensales dijo a Jesús: Bienaventurado el que coma en el Reino de Dios. Jesús le contestó: Un hombre daba un gran banquete y convidó a mucha gente; a la hora del banquete mandó a su criado avisar a los convidados: Venid, que ya está preparado.
Pero todos a una empezaron a excusarse.
El primero le dijo: He comprado un campo y necesito ir a verlo. Dispénsame, por favor.
Otro dijo: He comprado cinco yuntas de bueyes y voy a probarlas. Dispénsame, por favor.
Otro dijo me acabo de casar, y por ello, no puedo ir...(...).
Y os digo que ninguno de aquellos convidados probará mi banquete".
¡¡¡todas eran excusas!!!
Como podemos ver todas eran excusas, y parecen razonables, pero no tenían razón y ninguno de ellos entró al Banquete, al Cielo.
Hemos de estar atentos a la cantidad de invitaciones que nos hace el Señor...
¿Qué excusas solemos poner?
-No tengo tiempo. (El dueño del tiempo es el Señor).
-Para más adelante. ¿Sabes si vas a tener "el más adelante"?)
-Cuando cambien las circunstancias
-Cuando sea mayor
-Mañana (¿Para lo mismo responder mañana"?)
-No lo veo claro.
-No quiero complicarme la vida...
¿se llenó de comensales?
No juguemos con la gracia de Dios. Con Dios no se juega. No pongamos excusas.
¡¡¡NO VALEN EXCUSAS!!!
Jesús Mateo. Sacerdote..
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Que Dios pague ese esfuerzo diario y que Santa María la Virgen no nos abandone nunca. Franja.
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Confeccionado por Franja
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