domingo, 1 de agosto de 2021

COMENTARIO DEL EVANGELIO: "SEÑOR, DANOS SIEMPRE DE ESTE PAN". (Jn 6, 24-35)

Homilías del Papa y Temas sacerdotales

Hoy D. Jesús Mateo me envía el presente comentario:

<{}>

1 de Agosto, Domingo 2021

COMENTARIO DEL EVANGELIO: "SEÑOR, DANOS SIEMPRE DE ESTE PAN". (Jn 6, 24-35)

Comienza el llamado discurso del Pan de Vida que iremos comentando estos domingos. Como sabes, Dios alimentó a su pueblo con el maná, el pan bajado del Cielo. Así nos lo recuerdan la Primera lectura de hoy y el salmo responsorial. En el Evangelio nos dice que trabajemos por el alimento que perdura para la vida eterna.

Vemos en el Evangelio que después de los panes y de los peces, la multitud entusiasmada, busca de nuevo a Jesús. Quieren hacerle rey, pero el Señor se apartó de ellos. Cuando de nuevo le encontraron, les dijo Jesús: En verdad, en verdad os digo que vosotros me buscáis no por haber visto milagros, sino porque habéis comido de los panes y os habéis saciado.

Quizás hoy se busque a Jesús por motivos sociales en las Primeras Comuniones y en los Funerales. Muchos dejan de recibir la Sagrada Comunión y de creer en ella al llegar a la adolescencia o al entrar en la Universidad.¡¡¡Qué pena sentirá el Señor!!! Hoy, como en tiempos de Jesús, muchos le abandonan y dejan de ir a Misa y de recibir los Sacramentos.

Tú y yo, como los buenos israelitas del tiempo de Jesús, le decimos: Señor, danos siempre de este pan. Tenemos hambre y sed de Ti. Por ocho veces Jesús les dice que Él es el Pan de Vida, que el pan que él nos viene a dar es su propia carne, pan bajado del Cielo y que da la vida al mundo.

 

Muchos no comprendieron estas palabras y abandonaron al Maestro. Les pareció una locura y, hablando a lo humano, es cierto, es una locura. "El más grande loco que habrá  es Él. ¿Cabe mayor locura que entregarse como Él se entrega, y a quienes se entrega?

"Porque locura hubiera sido quedarse un Niño indefenso; pero, entonces, aún muchos malvados se enternecerían, sin atreverse a maltratarle.  Le pareció poco: quiso anonadarse más y darse más. Y se hizo comida, se hizo Pan¡ Divino loco! ¿Cómo te tratan los hombres?... ¿Yo mismo?" (Forja, n. 824).

Señor mío y Dios mío: ¿Cómo me preparo para recibirte ¿Cómo es mi fe, mi alegría, mis deseos? Yo te pido, Señor, que me concedas la gracia de que mis Comuniones estén más llenas de amor. Que pueda decir con el Apóstol San Pablo: "Vivo, pero ya no yo, es Cristo quien vive en mí" (Gal 2, 20).

Que Nuestra Señora nos dé sus mismos sentimientos de adoración y de amor.

Jesús Mateo. Sacerdote.

<{}>

Que Dios pague ese esfuerzo diario y que Santa María la Virgen no nos abandone nunca. Franja.

<{}>



No hay comentarios: