Blog de Tío Paco-Franjaoli-Franja
29 August
2013. Andrea Tornielli
vaticaninsider.lastampa.it
La estatua de la Virgen dejará Portugal en octubre para llegar a
Roma; el Papa quiere confiar el mundo al Corazón de María
El
próximo 13 de octubre, el día de la última aparición de la Virgen de Fátima, Papa Francisco confiará el mundo a
María. Un acto que forma parte de las celebraciones para el Año de la Fe , que retoma los que hicieron
sus predecesores, a partir de Pío
XII hasta Juan Pablo
II. Un acto que demuestra claramente la particular devoción mariana
del Pontífice argentino.
La
estatua original de la Virgen
de Fátima, que lleva todavía en la corona uno de los proyectiles que iban
dirigidos en contra de Juan Pablo II en el atentado del 13 de mayo de 1981,
llegará a la plaza San Pedro el sábado 12 de octubre por la tarde. Francisco
estará esperando su llegada. Es la décima vez en poco menos de un siglo que la
efigie mariana conservada en la capillita de las apariciones de Fátima deja el
santuario portugués. Antes del anochecer, la estatua será llevada al santuario
romano del Divino Amor, en donde habrá una vigilia de oración. El 13 de octubre
por la mañana la estatua volverá a la plaza San Pedro, en donde, después del
Rosario, el Papa celebrará una Misa y confiará el mundo a María.
La
primera de las consagraciones del mundo a la Virgen de Fátima se llevó a cabo durante el
pontificado de Papa Pacelli.
El 31 de octubre de 1942, en medio de la Segunda Guerra
Mundial, Pío XII (hablando en portugués por la radio) consagró el mundo al
Corazón Inmaculado e hizo una alusión velada a Rusia, según la petición que
hizo la aparición a los tres pastorcillos de Fátima. Otra consagración también
se llevó a cabo justamente en la plaza San Pedro y la hizo Juan Pablo II, el 25
de marzo de 1984, en un momento en el que la tensión sobre los misiles europeos
era muy elevada.
La
estatua original volvió al Vaticano el 8 de octubre de 2000. En aquella
ocasión, Juan Pablo II, ante la presencia de 1.500 obispos de todo el mundo,
encomendó el nuevo milenio a la
Virgen pronunciando frases que entonces (once meses antes de
los hechos del 11 de septiembre de 2001) no fueron comprendidas. Dijo, de
hecho, que la humanidad se encontraba en una encrucijada y que podía
transformar el mundo en un jardín lleno de flores o en una montaña de
escombros.
Papa
Francisco hizo una alusión a la estatua de la Virgen durante su primer Ángelus, el
domingo 17 de marzo, cuando habló sobre una de las copias de la estatua que
hizo un peregrinaje por el mundo: «Recuerdo, apenas obispo, en 1992,
llegó a Buenos Aires la Virgen
de Fátima y se hizo una gran misa por los enfermos. Yo fui a confesar a esa
misa...». Francisco también recordó que una mujer anciana fue a confesarse
y le dijo, sorprendiéndolo por la profundidad de su fe sencilla: «Si el
Señor no perdonara todo, el mundo no existiría».
Un
mes después fue el patriarca de Lisboa, el cardenal José Policarpo el que anunció que
Francisco le había pedido que consagrara su pontificado a la Virgen de Fátima: «Papa
Francisco me pidió en dos ocasiones que consagrara su nuevo ministerio a
Nuestra Señora de Fátima». El acto de consagración se llevó a cabo el 13 de
mayo. «Estamos todos a tus pies, los obispos de Portugal en compañía de
esta multitud de peregrinos, en el 96 aniversario de tu aparición a los
pastorcillos−recitó Policarpo− para llevar a cabo el deseo de Papa
Francisco, claramente manifestado, de consagrar a ti, Virgen de Fátima, su
nuevo ministerio de obispo de Roma y pastor universal».
Francisco
no tiene ningún problema a la hora de manifestar públicamente su apego mariano,
como lo demuestran las cinco visitas que ya hizo para rezar en la Basílica de Santa María
Mayor. La primera fue el 14 de marzo, inmediatamente después de la elección,
para ofrecer un ramo de flores al icono de la Salus Populi Romani y
pedir su protección para la ciudad de Roma.
El
Papa después volvió el 4 de mayo para recitar el rosario, y volvió a ir el día
de la fiesta del Corpus Domini, al final de la procesión. Francisco
quiso recogerse en oración ante el icono de la Salus Populi Romani poco
antes de partir hacia Río de Janeiro, cuando encomendó a la Virgen la Jornada
Mundial de la Juventud. El 29 de julio, acabando de llegar al aeropuerto de Ciampino desde Río,
pasó nuevamente para una oración de agradecimiento.
Entre
las devociones marianas más entrañables para el Papa destaca una que él mismo
ayudó a difundir por Argentina, la de María la que desata los nudos. Una devoción que
nació con una imagen votiva bávara de 1700 (Maria Knotenlöserin) y que
ahora se conserva en una capilla de la Iglesia románica de San Peter en Perlach, de la
que se ocupan los jesuitas en el corazón de Agsburg, Barviera.
En
este lugar, recordó Stefania
Falasca en el periódico Avvenire, durante sus estancias
de estudio en Ingolstadt, el padreBergoglio descubrió
el icono. Volvió a Argentina y comenzó a divulgarlo. Como auxiliar en Buenos
Aires se encargó de que se le dedicara un santuario a esa efigie. Y como
arzobispo inauguró varias capillas dedicadas a la Virgen y adoptó, si se
puede decir, su imagen como “tarjeta de presentación” que
incluía en su correspondencia. La
Virgen aparece representada tratando de deshacer los nudos
(grandes y pequeños) de una cinta que le ofrecen algunos ángeles.
Andrea Tornielli
2 comentarios:
El Papa debe saber que la Sma. Virgen pide la consagración de Rusia a su Inmaculado Corazón, acompañado por los obispos ¿Por que razón no le obedece? Ayudémoslo con nuestras oraciones.
http://infocatolica.com/blog/buhardilla.php/1308130246-el-papa-francisco-consagrara y busca: Consgración de Rusia para Juan Pablo II.
No te olvides de el el muro cayó después de la Consagración del Papa con todos los Obispos del mundo.
Ahora, el 13 de octubre, ante la Imagen de la Virgen de Fátima que será llevada para esa ocasión consagrará al mundo para pedir la paz.
Nosotros tenemos que unirnos y consagrarnos.
Estamos muy alejados de Dios. ¿Solo el Papa tendrá que hacerlo?
Que Dios y la Virgen te bendiga. Franja
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